Diana "Artemisa" García
Moderadores:tmastring, Freeman
La puerta se cierra haciendo más profunda la negrura de la sala. Las persianas cerradas a cal y canto, todas las lámparas apagadas, ninguna fuente de luz salvo.... en el fondo de la sala, junto a la pared de la derecha un pequeño reloj digital, el de un vídeo, tal vez.
La ira de la joven se hacía cada vez más y más palpitante, con los nervios a flor de piel y aquel olor golpeándole en las fosas nasales...
- Debería ser más amable, ya sabe, en casa ajena hay que mostrar respeto por el anfitrión.- La voz era sin duda la del misterioso oriental del teatro.
- Ahora me obliga a ser brusco con usted... lamento mucho esta situación- Un chasquido de dedos y la joven se encontraba en el suelo.
Parecía que el hombre no estaba solo en la habitación. Un duro golpe contundente en las rodillas la había obligado a doblar las piernas y ahora se encontraba tumbada sobre una alfombra o tal vez moqueta con las piernas dobladas y la cara retorcida por el dolor. A escasa distancia, al menos así lo creía se encontraba su “amigo”, el sonido de su voz parecía decirle que estaba en lo cierto.
- Bien señorita... ahora dígame, ¿porqué ha hecho caso omiso de nuestra conversación?, dependiendo de sus motivos Alberto morirá de una forma más compasiva o.... mejor que no lo sepa.
La ira de la joven se hacía cada vez más y más palpitante, con los nervios a flor de piel y aquel olor golpeándole en las fosas nasales...
- Debería ser más amable, ya sabe, en casa ajena hay que mostrar respeto por el anfitrión.- La voz era sin duda la del misterioso oriental del teatro.
- Ahora me obliga a ser brusco con usted... lamento mucho esta situación- Un chasquido de dedos y la joven se encontraba en el suelo.
Parecía que el hombre no estaba solo en la habitación. Un duro golpe contundente en las rodillas la había obligado a doblar las piernas y ahora se encontraba tumbada sobre una alfombra o tal vez moqueta con las piernas dobladas y la cara retorcida por el dolor. A escasa distancia, al menos así lo creía se encontraba su “amigo”, el sonido de su voz parecía decirle que estaba en lo cierto.
- Bien señorita... ahora dígame, ¿porqué ha hecho caso omiso de nuestra conversación?, dependiendo de sus motivos Alberto morirá de una forma más compasiva o.... mejor que no lo sepa.
Re: Diana "Artemisa" García
Con el dolor en la rodilla al golpear el suelo sus ojos no cambiaban en lo mas mínimo la rabia qué llevaba dentro aunado con las palabras del oriental al decirle lo de Alberto.
Re: Diana "Artemisa" García
Una sonora carcajada estalla en los oídos de Artemisa haciendo que pierda aún más el control.
- No estás en posición de dar ordenes a nadie, es más, creo que deberías comenzar a preocuparte por como vas a suplicar por tu vida.
Una pequeña lámpara se enciende delante suyo. Apoyada en una pequeña mesita en el lateral de un sofá ilumina tímidamente la habitación. Sentado en él, un hombre de rostro familiar, rasgos asiáticos, traje gris... puede que otro diferente al de hace un rato.
- Bien, bien, bien. No tocar, no mirar, no oler.... ni siquiera pensar.... pensé que mis ordenes habían sido claras. Tanta comida basura no os deja pensar, puede que sea por eso.
No sabía porqué pero algo en aquel hombre no acababa de cuadrarle, tal vez era la entonación, las palabras, la forma de moverse mucho más agitada, o puede que era la rabia que se agolpaba en su cuerpo hacia aquel individuo lo que le hacía verle totalmente diferente a como había sido en el teatro.
- Tal vez necesitamos un regalo, una pequeña caja para que las amenazas dejen de tener significado. ¿Una mano estaría bien?, seguro que a Alberto no le importa compartirla con nosotros.
El hombre se regodea en la reacción que esas palabras provocan en la joven que se revuelve en el suelo, acercando su cara a ella.
- Por el momento tu no pagarás las consecuencias.... ese privilegio le corresponde a él. Si comienzas a hacer caso... puede que sobreviváis casi enteros.
Sobre la moqueta deja caer un pequeño colgante.... una joya familiar, ¡La medalla que siempre llevaba al cuello!, ¿como podía ser?, no habían tenido tiempo de... ¿o si?.
- No estás en posición de dar ordenes a nadie, es más, creo que deberías comenzar a preocuparte por como vas a suplicar por tu vida.
Una pequeña lámpara se enciende delante suyo. Apoyada en una pequeña mesita en el lateral de un sofá ilumina tímidamente la habitación. Sentado en él, un hombre de rostro familiar, rasgos asiáticos, traje gris... puede que otro diferente al de hace un rato.
- Bien, bien, bien. No tocar, no mirar, no oler.... ni siquiera pensar.... pensé que mis ordenes habían sido claras. Tanta comida basura no os deja pensar, puede que sea por eso.
No sabía porqué pero algo en aquel hombre no acababa de cuadrarle, tal vez era la entonación, las palabras, la forma de moverse mucho más agitada, o puede que era la rabia que se agolpaba en su cuerpo hacia aquel individuo lo que le hacía verle totalmente diferente a como había sido en el teatro.
- Tal vez necesitamos un regalo, una pequeña caja para que las amenazas dejen de tener significado. ¿Una mano estaría bien?, seguro que a Alberto no le importa compartirla con nosotros.
El hombre se regodea en la reacción que esas palabras provocan en la joven que se revuelve en el suelo, acercando su cara a ella.
- Por el momento tu no pagarás las consecuencias.... ese privilegio le corresponde a él. Si comienzas a hacer caso... puede que sobreviváis casi enteros.
Sobre la moqueta deja caer un pequeño colgante.... una joya familiar, ¡La medalla que siempre llevaba al cuello!, ¿como podía ser?, no habían tenido tiempo de... ¿o si?.
Re: Diana "Artemisa" García
Los ojos de Diana eran rojos, no por haber llorado hace apenas unos instantes si no por que eran inyectados por la rabia de su interior al ver todas las acciones del oriental solo una palabra en la mente de Diana se formaba. "venganza" al ver de pronto el collar que ella llevaba ese collar era de su madre se la había dado cuando ella tenia tan solo tres años; era una reliquia familiar antes era de su abuela, después paso a su madre y ahora era de ella era el único recuerdo que no se quitaba en publico eso la hacia tener fuerza ante cualquier circunstancia. Ahora se sentía mas iracunda que antes de lo que le hubiera dicho ù hecho el oriental, su sangre hervía, sus músculos se trenzaron mas de lo acostumbrado y su voz cambio de la ira habitual a la rabia total. Con la cabeza agachada sin ver a los ojos al oriental musitas unas palabras apenas audibles para los que están el cuarto
Re: Diana "Artemisa" García
Una fuerte patada impacta en la boca del estómago de Artemisa que no puede más que retorcerse de dolor en el suelo, tratando de aguantar su sonrisa, cosa que no consigue.
- ¡Eso no es necesario!, hace unos minutos ha dejado de ser una amenaza.- Las palabras del hombre eran para alguien que Artemisa no llegaba a ver, el que le había pegado la patada- Bonitas palabras pero carentes de significado. Lamento llegar a estos extremos con las nuevas mascotas pero... aún así os daré a elegir, ¿que mano preferís que pierda vuestro amigo?, dispones de medio minuto para elegir, en caso contrario puede perder algo más que una mano.
El tono del hombre era diferente al del que había escuchado en el teatro, más duro, más directo, más seco... la expresividad también habían cambiado... la voz era la misma pero había algo raro.
- Así espero que hagas más caso cuando te hablen....¿derecha o izquierda?.
- ¡Eso no es necesario!, hace unos minutos ha dejado de ser una amenaza.- Las palabras del hombre eran para alguien que Artemisa no llegaba a ver, el que le había pegado la patada- Bonitas palabras pero carentes de significado. Lamento llegar a estos extremos con las nuevas mascotas pero... aún así os daré a elegir, ¿que mano preferís que pierda vuestro amigo?, dispones de medio minuto para elegir, en caso contrario puede perder algo más que una mano.
El tono del hombre era diferente al del que había escuchado en el teatro, más duro, más directo, más seco... la expresividad también habían cambiado... la voz era la misma pero había algo raro.
- Así espero que hagas más caso cuando te hablen....¿derecha o izquierda?.
Re: Diana "Artemisa" García
Una fuerte patada impacta en la boca del estómago de Artemisa que no puede más que retorcerse de dolor en el suelo, tratando de aguantar su sonrisa, cosa que no consigue.
- Así espero que hagas más caso cuando te hablen....¿derecha o izquierda?.
- Así espero que hagas más caso cuando te hablen....¿derecha o izquierda?.
Re: Diana "Artemisa" García
- Si así lo quieres.... así será, aunque es una lástima, era un hombre capaz.
El hombre hace una pausa recogiendo algo de la mesa adyacente al sofá.
- Bueno, ya habéis oído, a vuestro gusto. Al terminar acercar el “regalo” para la señorita. En cuanto a él... evitad que muera, todavía quedan muchas partes que pueden ser más que útiles, sin contar su información claro.
El sonido es inconfundible, una tapa de móvil cerrándose.
- Creo que una buena ducha fría sería ideal mientras le traen algo para que cambie de opinión.
Artemisa es arrastrada por las esposas hasta el baño por un hombre corpulento del que no puede ver la cara. Con poco tacto es tirada dentro de la bañera, no podría decir si entre dos o más personas, pero el impacto y la velocidad son más que considerables. Aterriza aún boca abajo con sus pies sobresalen mientras un lujoso tapón se le clava en la cara.
Cuando intenta apartarse de la molesta marca un chorro de agua helada comienza a caer sobre ella helándole todo el cuerpo, penetrando el frío hasta los huesos.
Tras varias tentativas de cambiar de posición, frustradas por sus captores la vuelven al suelo del baño, sobre una pequeña alfombrilla empapada.
No sabría decir cuanto tiempo había pasado bajo aquel chorro pero sin duda había sido terriblemente duro. Los músculos estaban agarrotados, su piel había tomado un color violáceo y no podía coordinar movimiento alguno salvo una incontrolable tiritona.
- Esto es lo que le habíamos prometido.
Su cabeza es levantada y sujeta para que pueda ver lo que le muestran.
En el frente una caja de madera, con un color pálido sujetada por las manos del oriental. El tamaño era considerable.
Tras cerciorarse de que la mujer viera bien lo que le enseñaban el oriental abre la caja.
Lo que vio la dejó sin palabras, brutalmente impactada.
El hombre hace una pausa recogiendo algo de la mesa adyacente al sofá.
- Bueno, ya habéis oído, a vuestro gusto. Al terminar acercar el “regalo” para la señorita. En cuanto a él... evitad que muera, todavía quedan muchas partes que pueden ser más que útiles, sin contar su información claro.
El sonido es inconfundible, una tapa de móvil cerrándose.
- Creo que una buena ducha fría sería ideal mientras le traen algo para que cambie de opinión.
Artemisa es arrastrada por las esposas hasta el baño por un hombre corpulento del que no puede ver la cara. Con poco tacto es tirada dentro de la bañera, no podría decir si entre dos o más personas, pero el impacto y la velocidad son más que considerables. Aterriza aún boca abajo con sus pies sobresalen mientras un lujoso tapón se le clava en la cara.
Cuando intenta apartarse de la molesta marca un chorro de agua helada comienza a caer sobre ella helándole todo el cuerpo, penetrando el frío hasta los huesos.
Tras varias tentativas de cambiar de posición, frustradas por sus captores la vuelven al suelo del baño, sobre una pequeña alfombrilla empapada.
No sabría decir cuanto tiempo había pasado bajo aquel chorro pero sin duda había sido terriblemente duro. Los músculos estaban agarrotados, su piel había tomado un color violáceo y no podía coordinar movimiento alguno salvo una incontrolable tiritona.
- Esto es lo que le habíamos prometido.
Su cabeza es levantada y sujeta para que pueda ver lo que le muestran.
En el frente una caja de madera, con un color pálido sujetada por las manos del oriental. El tamaño era considerable.
Tras cerciorarse de que la mujer viera bien lo que le enseñaban el oriental abre la caja.
Lo que vio la dejó sin palabras, brutalmente impactada.
Re: Diana "Artemisa" García
El frió en todo su cuerpo hizo volver un poco de la cordura de Diana; mientras el agua helada le golpeaba una y otra vez su cerebro empezaba a entender cada una de las cosas que habían pasado en el cuarto contiguo.
Re: Diana "Artemisa" García
- La verdad es que si, una oportunidad de que tu amigo pueda salir con vida de esta y quién sabe, quizás tu también.
Con fuerza sujeta la cara de la muchacha y seca su pelo con una toalla, haciéndola entrar en calor poco a poco.
- Lamentamos el haber tenido que pedirle un par de piezas prestadas pero...no nos has dejado opción.
El hombre que la vigila la vuelve a levantar y la dirige hacia el salón nuevamente.
- Tiene que hacer un trabajito para nosotros y esta vez espero que lo haga mejor de lo que pretendía hacerlo aquí.
- ¿De acuerdo?
La luz ahora encendida en el salón deja ver en una mesa con papeles sobre ella.
Con fuerza sujeta la cara de la muchacha y seca su pelo con una toalla, haciéndola entrar en calor poco a poco.
- Lamentamos el haber tenido que pedirle un par de piezas prestadas pero...no nos has dejado opción.
El hombre que la vigila la vuelve a levantar y la dirige hacia el salón nuevamente.
- Tiene que hacer un trabajito para nosotros y esta vez espero que lo haga mejor de lo que pretendía hacerlo aquí.
- ¿De acuerdo?
La luz ahora encendida en el salón deja ver en una mesa con papeles sobre ella.
Re: Diana "Artemisa" García
Diana se a ido; el shock de hace unos momentos la hizo que se escondiera como un niño pequeño al ver que el monstruo del closed sale y ella se esconde debajo de las cobijas. Así ella se a escondido en alguna parte de su cerebro al ver todas las cosas que le han pasado en tan pocos minutos. Ahora solo sabe que Artemisa queda su "altear ego" salio de ella la forma salvaje, indómita e inestable.